Exploring Buenos Aires: Entrevista a Michel Ibarra, un turista cubano que decidió quedarse en el país.

Michel Ibarra tiene 25 años y nació en la Habana, Cuba. Cuando su familia tuvo la oportunidad de salir del país viajaron a Chile y decidieron cruzar la cordillera para conocer Argentina. Desde noviembre del año pasado están radicados en el barrio de Belgrano y encontraron un nuevo futuro. Conocé su historia:

¿Cómo llegaron al país?

Mi padre trabajaba para una empresa argentina de software en Cuba, eventualmente vino a conocer y decidió trasladarse aquí. Anteriormente estuvimos de vacaciones en Chile y allí decidí jamás regresar a La Habana. Llegué a Buenos Aires en noviembre del 2011 y comencé a buscar universidades para estudiar abogacía. Finalmente elegí la Universidad del Salvador y ellos hicieron todo el trámite con el Ministerio de Exteriores. Actualmente tengo una visa de estudiante, que me permite ser residente temporal.

¿Qué es lo que más te gusta de vivir en Buenos Aires?

Puede sonar cliché, pero definitivamente la gente es lo que más me gusta. Siempre se dice que los cubanos somos generosos, buenas personas, muy amigables, y no siempre es así. Los argentinos hasta ahora sí han sido de esta manera. A todas partes que hemos ido, mis padres y yo hemos sido tratados muy generosamente. Puede ir desde la educación y una responsabilidad en los servicios – algo que en Cuba falta mucho – hasta gente que te ayuda con grandes cosas y sin llevarse algo a cambio. He encontrado personas realmente generosas aquí.
Otra cosa que me alivia mucho es que Buenos Aires es una mega-ciudad. Yo nunca he sido una persona de campo. De alguna manera, lo que más me tranquiliza es una urbe con todas las de la ley. Me gustan los edificios altos, los árboles y las corrientes de viento que crean -es una ciudad fresca, a mi parecer-. Me gusta que hayan tantas personas, porque sabes que siempre te quedan más por conocer. Me gusta la variedad de cosas y lugares que hay para ver.

¿Qué diferencias encontrás entre Argentina y Cuba?

La primera diferencia es que Argentina me acogió y me da la posibilidad de tener un futuro a corto y largo plazo. En Cuba hay muchos problemas materiales, pero el mayor problema, el que hace que la mayor parte de la juventud se vaya o se quiera ir, es espiritual. Allá no puedes trabajar hasta que no te gradúes, tu salario no te alcanzará para cosas básicas y probablemente controlen tanto lo que haces profesionalmente que no tendrás oportunidad de crecer. El techo limitador es muy bajo para un joven. Aquí en Argentina hay cosas que mucha gente de mi edad hace y que allá es casi imposible de hacer, como trabajar para pagarte tus cosas, o tener internet para estudiar y divertirte.

¿Qué lugar recomendarías para que los seguidores de Bs As Exploring visiten?

Aunque aún no he salido de Buenos Aires, me han hablado muy bien de provincias como Salta, Córdoba, Mendoza y Tierra del Fuego. Los paisajes son increíbles, sobre todo en las provincias con cordillera. Aquí recomiendo simplemente salir a pasear, sobre todo los fines de semana. Ir al Abasto Shopping, por ejemplo, me parece precioso. Básicamente no puedes caminar mucho sin encontrarte un lugar digno de visitar: La Plaza de Mayo, la Casa Rosada, la Catedral, el Obelisco y la inmensidad de la 9 de Julio. También el Café Tortoni, la plaza del Congreso, la peatonal de Florida, el Cementerio de la Recoleta, el teatro Colón, San Telmo, Caminito, Puerto Madero, el Jardín Botánico y el Japonés, y más. Hay tanta cultura por doquier que no puedo elegir un solo lugar. Todo está hecho con pasión, así que cada turista, no importa de donde venga, encontrará algo que lo fascinará.

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